viernes, 16 de diciembre de 2016

ADOLFO SUÁREZ


CAPÍTULO   C C L X X X

LA LIQUIDACIÓN DE FIDECAYA.- ID-SÁB-02-01-82-P1-9
                     El problema de Fidecaya está resuelto.-   El Consejo de Ministros aprueba un decreto ley para retejer a los pequeños ahorradores.-   El Estado dice que mantiene su compromiso de garantizar a los pequeños ahorradores la devolución del cien por cien de sus depósitos.-   Eso al menos es lo que dice el decreto ley aprobad en Consejo de Ministros, en el que se establece la liquidación forzosa de la entidad de Ahorro de Fidecaya.-
               Fidecaya, como entidad de ahorro ha estado funcionando perfectamente durante un montón de años.-   Ha tenido sus altibajos en ese tiempo, de lo que los clientes ni se enteraban, porque seguía la honradez de la entidad por encima de los devaneos de sus socios.-  Pero ha llegado un momento en que ya no se sabe si son los socios o que la entidad ha dado en quiebra.-
                En el lazo de veinticuatro horas dejaron de pagar, de devolver dinero a los clientes que lo pedían por alguna necesidad.-   Eso sí, el que quería meter dinero se le admitía, independientemente de no devolverlo si después lo necesitaba.-    En escasísimos días, más bien horas, se corrió la noticia de que que algo raro ocurrías en Fidecaya.-   Los clientes se lanzaron a las oficinas de la entidad, pidiendo sus ahorros.-   Quizás al principio alguno tuvo la oportunidad de que se los devolvieran, mientras hubo existencias de dinero en las oficinas.-
               Llegó el colapso, en el que la dirección dio órdenes de no devolver dinero a nadie.-   Las colas eran enormes en todas las oficinas de Fidecaya de todos los lugares de España.-   Los clientes se amontonaban, hacían largas colas y dormían en la entrada de los edificios  de las oficinas, con la esperanza de que al día siguiente les devolvieran sus ahorros.-
               Pero el Gobierno había echado mano del decreto-ley, y a primeros de diciembre s4e empezó a pagar a los pequeños ahorradores a través de diversas cajas de ahorros que se habían hecho cargo del pasivo de Fidecaya.-   Fidecaya nace en 1952 y se inscribió con un capital social de cinco millones de pesetas, suscrito por Rafael Caparrós Sánchez y familia, Juan de la Rosa, Cecilio Rodríguez e Imeldo Bello Alonso.-   En 1960 se amplió el capital a diez millones con la entrada de nuevos socios, y al año siguiente aumenta el capital a veinticinco millones.- En 1964 una nueva ampliación a cincuenta millones de pesetas, y en1968 se amplia a trescientos cincuenta millones de pesetas.-  Esta es la Historia la entidad de ahorros de Fidecaya, que se hundió .-




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