CAPÍTULO C C X X X I .-
Los POLITICOS QUE QUIEREN MORIR DE ÉXITO.-
ABC-MIÉRCOLES 06-03-91-P.16.
Son casi todos, aunque
todos no lo dicen, y alguno se atrevió a decirlo en una ocasión, cuando estaba
en lo alto de la fama, ahora que está en el suelo es posible que quiera morir
de pena.- Lo importante no es lo que
dijo Carmen García Blouse sobre don Carlos Solchaga, que arremetió contra la
libre opinión del ministro de Economía y Hacienda, que deja ver la brecha entre
el partido y el Gobierno.- A pesar de
todo, doña Carmen no es una militante cualquiera.- Es uno de los pesos pesados del partido, no
por su humanidad sino por su estatus.-
Estuvo en la vanguardia en los momentos decisivos, como en la Federación
de París, que impulsó el triunfo de Felipe González, y en el Congreso de
Toulouse que sepultó a Rodolfo Llopis, en el ostracismo de Pablo Castellano y
en la creación del Holding comercial del PSOE sacado adelante por la por
Enrique Ballester.-
Ella influyó,
presuntamente, en la andadura de Coopex, la que recomendó Aída Álvarez en el
‘tejemaneje’ de las finanzas.- De
cualquier forma, la opinión de García Blouse no es la de un militante, sino la de
un sector del partido.- Y es que en
estos momentos, el presidente del Gobierno no disimula lo mucho que le afecta
‘morir de éxito’.- En el último
Congreso del PSOE, Felipe quiso establecer la diferencia entre el Gobierno y el
Partido, tal vez ya tuviera firmado el cese de Alfonso Guerra.- No obstante, Guerra ha dedicado bastante
tiempo en dominar las tramas del poder como para que le exilien en un paraíso
dorado.-
El Congreso Extraordinario
de 1979 demostró lo que para los jerifaltes tiene, asegurándose el respeto a
las diferentes corrientes de opinión.-
Mientras tanto, el presidente del Gobierno se encuentra cada día más
vencido por las circunstancias y se hace más patética su imagen, de un hombre
que parece vencido por sí mismo, solitario y receloso, y un poco impotente para
poder soportar los no muy pocos errores que ha cometido durante el tiempo en el
poder.-
Se puede tomar nota de una
sucesión de contradicciones, conflictos regionales, total apoyo logístico en la
guerra del Golfo con fragatas incluidas, dinero al Magreb, y la pasividad
pusilánime de tener paralizada la vida política del país desde hace bastante
tiempo.- Esa pasividad se manifiesta ya
en casi todos los resortes del Estado, con unos ministros que ya no saben si hacer
o deshacer la maleta, quizás con algunos amigo que están esperando la
renovación del Gabinete.- Hay casos ya
como el de Rosa Conde, presuntamente rechazada por gentes principales del
partido e incluso del Gobierno, y Felipe se resiste a pagarle el billete de
ida, porque bastante lo ha protegido de muchos tropezones y caídas.-
En estos momentos, las
cosas están un poco serias y enredadas entre el partido y el Gobierno, porque
no es del desinterés ciudadano, lo que ocurra entre él en España, ya que todo
se ve bajo un prisma opaco.- ¡Quién quiere morir de éxito¡.- Mientras tanto la derecha desordenada en
reinos de taifas mirando al tandido.
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