CAPÍTULO XXXVVIII.-
FRANCO, MOLA Y
SALIQUET CONFERENCIAN.- IDEAL, 24-11-36.-
Los generales Franco, Mola y
Saliquet se reúnen en una conferencia que dura más de dos horas en Talavera de
la Reina, después Franco se fue a Navalcarnero.- Son tres de los dirigentes de esta contienda
nacional, aunque no hay que descartar a tantos generales como Yagüe, Queipo de
Llano, Moscardón y otros, por citar a algunos de los que siempre andan en
candelero en los medios informativos, como la radio y los periódicos.- Sobre todo, el general Franco es el que lleva
la batuta de esta guerra, con la licencia y el beneplácito de los demás
generales.-
La aviación nacional reanuda los
bombardeos a Madrid.- Se declara un
incendio en el ministerio de la guerra de Madrid.- Y una manifestación solamente de mujeres por
las calles madrileñas que llega hasta la plaza
de San Miguel, en la que van pidiendo la rendición de la ciudad.- Uno de los muchos obreros que se pasaban a
los nacionales lo ha dicho a su llegada a campo nacional-
Las manifestaciones en Madrid
están dando quebraderos de cabeza a las autoridades, jefes de las
guerrillas.- Las mujeres dicen que sus
maridos sólo irán al frente detrás de los jefes de la guerra.- Piden la rendición de Madrid.- Piden orden, paz alimentos y tranquilidad,
que de ninguna de esas cosas tienen .-
Madrid se ha convertido en un infierno, y esto es la rendición o la
huida.- ¿Pero dónde se puede huir ya,
que no esté ocupado por los nacionales?.-
La población de Madrid padece mucha
hambre, falta de toda clase de alimentos.-
Se están refugiando por los barrios de Salamanca y de las Ventas, que
son las zonas que constituyen la seguridad que les dicen en las proclamas que
tiran los aviones nacionales, para que se salven de las bombas de la guerra y
otros desmanes.- Allí piden que se
refugien las mujeres, los niños y los viejos no combatientes.- Los que no tienen delitos de sangre están
deseando que entren los nacionales.-
La esposa del general Moscardó la tienen
presa los rojos.- Quien sabe lo que
estarán esperando, si puede ser como a su hijo que quisieron cambiarlo por la
rendición del Alcázar de Toledo, pero como Mola no consintió lo
fusilaron.- A la esposa de Moscardó la
torturan , después de haberle fusilado
un hijo y el otro que es pequeño sin saber dónde estará, ni los dos restantes
tampoco.- Dicen que el carcelero, que
siempre ponen a los más herejes, la insulta permanentemente y hace aumentar el
suplicio, con las escalofriantes noticias de que la suerte del Alcázar estaba
echada, y que su marido sería fusilado.-
No obstante, la realidad es que las ofensivas rojas han sido derrotadas, donde las columnas
Internacionales fracasaron.-
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