CAPÍTULO
CLIV
Si
España deja de crecer al ritmo que va creciendo, el ´déficit seguirá creciendo,
como últimamente ha dado un salto en el vacío.-
Los saltos en el vacío son peligrosos.-
Preguntarle a Tsypras que ha pegado varios, y de tanto cariño como le
pusieron las masas – de esas tenemos en España para exportar-a los jubilados
les duele la cuenta corriente, y los cajeros de los bancos están
averiados.- Lo que es peor aún es que no
han podido asustar a la Troica y meterle los gabachos en la barriga.- Ha sido la Troica la que le envió la medicina
para los dolores de cabeza a Tsypras, y con ello alguna rebelión de las masas.
España
anda entre un camino muy delgado y el abismo, sólo hace falta una pequeñísima
sorpresa para que se desplome y, con el riesgo, desde allende la frontera de
los Pirineos, pongan la veda.- Lo de
cerca del millón afiliados a la Seguridad Social, solo por la cara, sin la
cotización correspondiente, así por la cara, aunque sea una obra de caridad, va
a levantar grandes ampollas en los bolsillos de los jubilados que cotizaron.
Las
promesas de derogaciones no hace falta que las mencionen, porque para eso entran
a caballo en las Cortes los cambios.- La costumbre, como el general Manuel Pavía
y Rodríguez de Alburquerque, entró en las cortes a caballo para entregar una nota
al presidente de las Cortes. Cuyo golpe de Estado terminó en la práctica con la
primera República.
Derogar
es lo de siempre, quito esa ley y pongo la mía, aunque la ciudadanía se joda, pero
es mi política, como la ley de enseñanza.- Lo que pasa es que en cada comunidad tienen su
criterio propio y la quitan tanto que al final es papel mojado.
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