jueves, 12 de noviembre de 2015

MIS RECUERDOS DE LA GUERRA EN MARTE

LA PETICIÓN DE LA NOVIA DE JUNIOR

          Llegó el día de la petición de Marr, todo estaba preparado en el Hotel de España del Desierto Verde.-  Flor de Loto repasaba los detalles por si algo se había escapado a su intuición.-  La familia de la Ciudad Roja, que llegaron la noche antes, estaban descansando y siendo bastante tarde llamó por el interior a Rosana.-  Estoy levantada, contestó, y bajamos en unos minutos.-  Cuando todos estaban reunidos en el salón del hotel se dieron cuenta de que faltaba Tyllo-Junior.-  Manu, que estaba levantado temprano, les dijo que no esperaran a Junior, que salió temprano a dar un paseo.-
           Manu dice la verdad, dijo Junior entrando por la puerta del comedor cogido de la mano de Marr, radiantes de felicidad y a los pareceres bastante besuqueados por las señas que llevaba Tyllo Junior de pintura.- Rosana que se dio cuenta llamó a su hijo para darle un beso y le alagó un pañuelo y unas palabras,.  El chico  que iba a limpiarse, le dice Marr: espera antes de limpiarte, y lo abrazó y besó delante de todos con deseo de enamorada.
           Ante la sorpresa  de todos que se desbordaron en aplausos.-  Pero la sorpresa fue mayor cuando vieron en la entrada a los padres de Marr aplaudiendo también que estaban presenciando los deseos de los dos jóvenes.-  Los aplausos se repitieron con los camareros y personal asistente en el Hotel.- Y Tyllo Junior cogió a Marr por el talle y se fundieron de nuevo en el profundo beso que están deseando delante de toda la familia.-
         Marr, muy a su pesar, miró a sus padres y a la mesa donde estaba reunida la familia, y se ruborizó tanto que Junior le dijo al oído, ¿Lo repetimos?.- Lugar tendremos, pero ahora voy a recibir a mis padres.-  Dirás que vamos a recibirlos.-  Sí, disculpa, eso quería decir.-  Y salieron al paso de los progenitores de Mar los dos enamorados y se fundieron en los saludos de rigor y de las circunstancias.-
          Los saludos se extendieron familiarmente, cuya fiesta se celebraba en honor de la petición de mano, como rito popular en aquel País y en las familias pudientes.-  Los chicos se desconectaron de los mayores y se perdieron por el laberinto de corredores.-  Niñito, dice Marr, así como me besas a mí no habrás besado a otras.-  Pero nena, si yo no he basado nunca a una mejor nada más que en las mejillas.-  Para ser primerizo besas que te caes de espaldas.-  Ya, que quienes te besaron te gustó menos?.-  ¡Nadie besó mis labios, sólo tú.- ¡ Niñito, no me hagas llorar¡.- Junior la abrazó.



No hay comentarios:

Publicar un comentario