ACONTECIMIENTO
Pío
viene de viaje y antes de llegar a su casa, que pasa cerca de la nuestra, llega
a dar la noticia.- Hoy he estado
hablando con tu hijo, le dice a mi abuelo y está bien.-
¿Y por qué no se ha venido contigo, dice mi madre?.- Pío sonríe y explica.- Tu marido y Sambombas se han pasado a las tropas nacionales, desde
que Queko dio la voz de que todo el que se pasara a los nacionales sin delitos
de sangre, solo sería juzgado por cuestiones menores, que serían cuestiones políticas
talvez.- Los dos están detenidos a la
espera de los informes del pueblo, que ya se los han pedido al jefe de Falange.- Yo también estuve presente en los informes y
te aseguro que dentro de pocos días estarán en casa.-
Allí
se formó como si fuera el llanto de un velatorio.- Pío se marchó diciendo que al día siguiente traería
más noticias.- Pero los llantos duraron
toda la noche y los rezos de la abuela.-
Lloramos todos, aunque yo no sabía por qué había que llorar.- Pero así
están los nervios en este estado de guerra en que nos metió Casakes
Quiroka el diecisiete de julio.-
Al día siguiente, cuando Pío vuelve
del viaje, se sienta en la casa y nos cuenta la historia de los dos presos: mi
padre y Sambombas.- Dice que los
papeleos tardarán poco más de una semana, que él ha visto los informes que se
enviaron de los dos, y que son de los mejores que se han enviado de los presos
de la zona roja.- Yo respiré hondo, por
lo de la quema de santos
Pío cuenta la historia que ellos le
dijeron.- En la batalla de Tekuel, donde
los dos estuvieron, murieron miles de
personas.- De los rojos quedaron pocas
fuerzas, los que no murieron, desertaron y cruzaron el Ekro hacia Cakakuña,
antes de que cortaran los puentes los nacionales o pusieran guardias.- Francisco y Sambombas tuvieron suerte y
escaparon con solo unos rasguños de balas, cuando los nacionales se apoderaron
de la capital y de la zona.- No había
donde elegir, o cruzar el Ebro a Cakakuña o pasarse a los nacionales.-
Mi padre le dijo a Sambombas, ¿me sigues?.- Dónde vas? .-
A mi casa.- Estuvieron andando
muchos días y comían de lo que cazaban, hasta que llegaron a la provincia de
esquivando fuerzas nacionales.- Estuvieron andando de noche y de día durmiendo
por todos los montes que atravesaban hasta llegar a la provincia, e informados
por los pastores se entregaron en un pueblo donde estaban los nacionales.-
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