LA PLAZA SE LLENA DE
BARBUDOS
Desde que terminó la guerra no paran de
llegar hombres al pueblo, gentes de aquí, que tienen sus familias, que unos
estuvieron en la zona roja y otros en la zona nacional, los unos licenciados
del Ejército, como mi padre, otros detenidos o entregados de la zona
roja o republicana- Pero, como dijo
Prako cuando tomó la ciudad del Estado, amnistía para todos los que no tengan
delitos de sangre, o delitos graves de robos o malos tratos.- Yo pienso que esta amnistía no le deberá de
alcanzar al Tuerto, aunque no tenga delitos de sangre.- porque a robos y malos
tratos no le ha ganado nadie, cuyas consecuencias sufro.-
Ya lo demuestra que en cuanto pisó el pueblo estuvo las Guardia
Nacional a detenerlo, en espera de que terminen las denuncias contra él, que no
está recibiendo ni la mitad de las gentes que expolió o maltrató con
denuncias.- En definitiva, los
expoliados o maltratados son más caballeros y más generosos que lo fue
él.- Por mi parte, solo de pensar en ese
sujeto, me empiezan los dolores en el cuello, que serán para mí vitalicios,
según me dijo el maestro-médico. que me ha estado atendiendo como médico.-
Otros del pueblo, también vinieron la Guardia Nacional por ellos y han
desaparecido del pueblo, y se cuenta que están en la cárcel de la capital,
esperando ser juzgados, unos seguidores del Tuerto y de sus malos tratos y
expolios, otros por algunas cosas peores.-
Los conozco a todos, porque soy del pueblo y he tenido la edad
suficiente para saber lo que pasaba, lo que hacían, y lo que no debieron de
hacer.- Pero, aunque han pasado cerca de
ochenta años, (setenta y cuatro), hay familiares vivos que no les gustaría que
se removiera lo que sus antepasados hicieron con sus convecinos, poniendo
nombres y apellidos, hechos y fechorías.- Sería muy doloroso para su familia.
Yo tengo esos nombres y apellidos y actos horrorosos acaecidos.- Me los reservo, me los llevo al otro barrio
para que sus familias vivan en paz.- Ya
pagaron, si la cárcel es pagar, o las penas de muerte son indemnizar.- Y es que en esta vida todo se paga, tarde o
temprano, tal vez por esos refranes: haz bien y no mires a quién, y haz mal y
guárdate a pagar.- Mi cervical , mi espina dorsal y mi afección craneoencefálica
quién me la va a pagar a mí, si es de por vida.- Peor aún se quedan las mujeres y los hijos de
esos seres que anduvieron mal y acabaron peor.-
Dejémosles que no tengan malos recuerdos ahora.- Don Estekan que es el único que lee mis
notas, me escribe siempre una palabra al final, ¡no los odies¡.
No hay comentarios:
Publicar un comentario