sábado, 31 de octubre de 2015

MIS RECUERDOS DE LA GUERRA

AÑORANZAS

                    Los mejores años de mi vida.-  Me gustaría que se repitiera la hazaña algún día con mis nietos si es que por casualidad los tengo, pero no, solo son sueños.-  Tengo unos excelentes recuerdos de esa niñez que, que junto a mi abuelo que lo era todo para mi, aprendí mucho sobre agricultura, regadío, sobre las cosas de la vida, y sobre las estrellas: ( las cabrillas, el carro, el lucero del alba, la estrella polar, el camino de Santiago y el hombre de la luna).- Había un hombre en la luna con un hacha.-  Y en cultura.
                   Sin saber leer mi abuelo era un experto en describir los astro, dice que en la guerra de África le enseñó un oficial de la Legión, tumbados en el desierto, mientras esperaban las huestes árabes.- Su mejor amigo, decía
                    Nuestra cama bajo el un frondoso árbol consistía en un hoyo en la tierra lleno de paja, una manta debajo y otra de repuesto al lado por si por la madrugada hacía frío.-   A pesar de todo recuerdo mi niñez, era feliz junto a mi abuelo.-  Es posible que hoy día con el avance tecnológico industrial e incremento del desarrollo, se considere una vida tercermundista aquella vida, pero había familia, había cariño y amor.-   Cuando uno se cría con todo cariño, con todas sus necesidades cubiertas, con plena libertad en la naturaleza, sin miedo a las malas hierbas humanas que abundan dentro y fuera de las ciudades, se añora el pasado, que era cariño y tranquilidad
                   Me levantaba al alba, cuando lo hacía mi abuelo, y me iba con él a hacer las faenas del campo, donde yo aprendía mucho.-  Por las tardes los dos a cuidar el ganado, que consistía en varias cabras para el consumo de leche de la familia, y varios cerdos para la, a veces, acostumbrada matanza también familiar.- 
                    Mis  ilusiones era muy limitadas en aquella edad, tal vez por el entorno y la vida que llevaba.-  No conocía otra vida ni otro entorno mejor.-  Y con la guerra en medio de las desesperación y la muerte, las desgracias familiares, económicas y sociales que a las que la sociedad estaba llegando, luchando hermanos contra hermanos.- Yo, por estar relacionado con mi abuelo iba a las escuela de noche y me daban buenas clases.-  Así, aprendía y trabajaba,  aprendía de campo, y era el lazarillo de mi abuelo.-



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