lunes, 26 de octubre de 2015

TYLLO EN MARTE


MARIO REGRESA A LA CIUDAD DEL DESIERTO

                      Tyllo-nene llama a Mar y quedan citadas Las dos amigas en el restaurante de siempre, que se presentarán los dos amigos esta tarde, le dice a su amada.-  Ella pregunta, que si hay algo más.- Tyllo-nene le dice que sí.-  Pues ya me dirás, golfo y más que golfo que me hizo llorar.-  Que te quiero con locura de amor.-   Marr se le fue un hondo suspiro que llegó hasta el joven, es para ti, amor de mi vida.-  Cuando podrás perdonarme lo borde que he sido contigo en aquella ocasión?.-  Mientras me digas te quiero estarás perdonado.-  ¡Tequieroooooo¡
                        Los dos amigos entraron en el salón del restaurante y miraron hacia el fondo.-  En una mesa estaban las dos flores que buscaban, sentadas de cara a la entrada, como si esperaran a alguien.-  Los dos pimpollos se acercaron a la mesa.-  Buenas tardes, flores de mayo y abril, dice Mario; buenas tardes flores de todo el año, dice Tyllo-nene.-  Buenas tardes contestan las dos damas, como si se hubieran puesto de acuerdo previamente, ‘’pimpollos’’.- El recibimiento en público no tiene derecho a besitos.-  Gracias mi amor, contesta Tyllo-nene.-
                    Como todas las tardes había baile en aquel restaurante, mientras hacían hora tomaba unos refrescos y charlaban entre los cuatro sobre la vuelta de Mario a la ciudad de Desierto.-  Me aburro solo en una ciudad tan grande.-  En este tiempo, todos los estudiantes están de vacaciones en alguna parte del Estado y en la ciudad lo único que se puede ver casi a diario, por ser la ciudad del Estado, son manifestaciones pidiendo imposibles, que ningún Gobierno puede dar, digo yo.-
                      Así que le dije a mi tita que me largo a la ciudad del Desierto porque allí me he dejado algo importante para mí y, mientras lo decía miraba a la flor que tenía enfrente pendiente de su conversación, aquí estoy mirando lo más hermoso que he encontrado en mucho tiempo.-  La chica se ruborizó un poco y le brillaron los ojos de satisfacción, al oír las palabras de Mario que las decía como si fuera un hombre enamorado.-  Yo espero que tus palabras sean verdadero hechos y no sueños vacacionales de paso por una ciudad.-  Mi tita, que puedo decir que es mi madre, porque era hermana y murió en el parto, me ha criado como un hijo  yo la quiero como a una madre, forma parte del CLAN-Españolo.-



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